Un chalazión es un problema del párpado muy frecuente que se caracteriza por una protuberancia en el párpado. Tiende a ser bastante profundo, debido a que está causado por la obstrucción de una de las principales glándulas sebáceas, la glándula de Meibomio, que está situada en un punto profundo del párpado.
Si se tiene un chalazión se puede experimentar dolor e hinchazón en el párpado, muy sensible al tacto. Pero también puede ocurrir que vaya aumentando el chalazión poco a poco de tamaño de forma indolora.
En general, con un tratamiento antibiótico o antiinflamatorio, el tamaño del chalazión se reduce progresivamente y el párpado se va deshinchando. Sin embargo, en muchos casos, después de la fase aguda del chalazión, la protuberancia persiste o se forma un quiste en el párpado, que a la larga puede requerir intervención quirúrgica.
¿Cómo se diferencia un chalazión de un orzuelo?
Un orzuelo es una obstrucción de uno de los folículos pilosos de la parte exterior del párpado. En general el orzuelo suele consistir en una bolita o punto blanco en la parte frontal del párpado. Un chalazión es diferente porque se trata de la obstrucción de una glándula sebácea en una parte mucho más profunda. El chalazión produce una inflamación más importante y más profunda, y no se observa ningún punto blanco. El orzuelo suele mejorar muy rápidamente con un tratamiento antibiótico leve en la zona afectada. También puede mejorar extrayendo la pestaña o presionando el punto blanco para que salga la secreción. El chalazión suele tardar mucho más en mejorar y normalmente requiere un tratamiento antibiótico, ya sea en comprimidos o en pomada y, en ocasiones, incluso puede ser necesario operar en caso de quiste o hinchazón persistente.